Pública

El ejercicio del periodismo en entornos digitales efímeros, sustentados íntegramente en redes sociales en la actualidad, plantea desafíos éticos específicos que desbordan los marcos deontológicos tradicionales y exigen de una urgente reformulación de nuevos estándares. La velocidad de publicación (y consumo), la lógica algorítmica, la centralidad de la interacción o la volatilidad de los contenidos son algunas de las razones que nos han llevado a plantear la necesidad de una reflexión normativa propia, capaz de garantizar el rigor informativo sin renunciar a la responsabilidad social del medio y la adaptabilidad del mismo.

En este contexto, resulta indispensable establecer un conjunto de principios que orienten tanto las decisiones editoriales como la gestión de comunidades digitales, asegurando la coherencia entre la práctica profesional, el interés público y los derechos fundamentales. Por ello, se plantea este decálogo con el fin de ofrecer un marco ético claro, operativo y exigente, adaptado a las dinámicas establecidas por los profesionales del sector en las redes sociales y otros portales, comprometidos a seguir desempeñando una labor crítica, inclusiva y transparente. Estos principios están enunciados desde una perspectiva tan abierta que son tan aplicables para el medio que ha acompañado mi proyecto en la asignatura de Periodismo y Social Media, como para cualquier otra propuesta de estilo similar.

Decálogo ético del medio: diez principios para un periodismo responsable en redes sociales

1. Veracidad y contextualización responsable
El medio se compromete a verificar de forma rigurosa la información antes de su publicación, por supuesto también en formatos breves y efímeros. La fugacidad propia de las redes sociales no es eximente de la obligación de contextualizar los hechos, evitar la desinformación y corregir de manera visible cualquier error detectado.

2. Perspectiva de género y enfoque interseccional
Todos los contenidos deberán incorporar una perspectiva de género transversal, evitando cualquier estereotipo, sesgo sexista o representación discriminatoria. El medio promoverá narrativas inclusivas y un enfoque interseccional que atienda a las múltiples formas de desigualdad, garantizando un tratamiento informativo respetuoso y equitativo.

3. Prevención y gestión de los discursos de odio
El medio rechazará activamente la difusión de discursos de odio, violencia simbólica o acoso, estableciendo previo conocimiento de usuarios, creadores y divulgadores una lista con los protocolos claros de moderación y actuación frente a comentarios o contenidos que vulneren derechos fundamentales, priorizando la protección de determinados colectivos y la construcción de una comunidad digital segura.

4. Rendición de cuentas y transparencia
El código ético expresa la vocación de apertura informativa del medio y su compromiso con el interés público. Se facilitarán canales de diálogo con la audiencia, se explicitarán los criterios editoriales y se asumirán responsabilidades ante errores, decisiones controvertidas o conflictos de interés.

5. Regulación interna y supervisión ética
El medio contará con mecanismos internos de supervisión y control de los procesos laborales y editoriales. Estos procedimientos garantizarán el cumplimiento del código deontológico, fomentarán la deliberación ética colectiva y asegurarán condiciones de trabajo coherentes con los valores que se defienden públicamente.

6. Cuidado de la salud mental en los contenidos
Dado su público prioritariamente joven, el medio abordará las cuestiones vinculadas a la salud mental con rigor, cautela y sensibilidad. Se evitará el sensacionalismo, se contextualizarán los temas delicados y se ofrecerán recursos informativos fiables que contribuyan al cuidado y la prevención.

7. Uso ético de la inteligencia artificial
La utilización de herramientas de inteligencia artificial será transparente, responsable y subordinada al criterio periodístico humano. El medio informará cuando se emplee IA en la producción de contenidos y velará por evitar sesgos, automatismos acríticos o prácticas que comprometan la credibilidad informativa. Conscientes del rechazo generalizado que esta provoca en la comunidad, el medio no hará un uso frívolo o baladí de la IA, ni jamás antepondrá el contenido gráfico o escrito creado por un humano al de una herramienta automatizada.

8. Protección de datos y privacidad
Se respetará escrupulosamente la privacidad de las personas, especialmente en entornos de alta exposición digital. El medio evitará la difusión innecesaria de datos personales y aplicará criterios estrictos de protección, consentimiento y minimización del daño, incluso en contenidos de corta duración.

9. Participación comunitaria responsable
La interacción con la audiencia será entendida como un espacio de construcción cívica. El medio fomentará la participación crítica y respetuosa, estableciendo normas claras de convivencia digital y asumiendo un rol activo en la dinamización ética de sus comunidades en redes sociales.

10. Compromiso con la formación y la reflexión continua
Este código no se concibe como un documento cerrado. El medio se compromete a revisarlo periódicamente, promover la formación ética de su equipo y adaptarlo a los cambios tecnológicos, sociales y culturales, manteniendo una actitud reflexiva y autocrítica permanente.